7 impresionantes edificios históricos abandonados
Edificios abandonados – 7 lugares abandonados
La exploración urbana de edificios abandonados es una práctica que presenta diversos riesgos no solo físicos sino también legales. Esta es la historia de la exploración urbana de 7 impresionantes lugares abandonados.
Sanatorium E – Lugares abandonados
El Sanatorium E fue construido en 1912 para el tratamiento de enfermedades pulmonares y tuberculosis en Alemania. Desde el año 1952 el complejo se convirtió en un centro de tratamientos dermatológicos y linfáticos. El edificio principal es de gran belleza y estaba dotado del equipamiento mas avanzado de la época. Tenía una capacidad máxima aproximada de 100 pacientes.
En el año 1994 el hospital se trasladó a una nueva ubicación y desde entonces el edificio ha permanecido abandonado. Aún quedan en su interior algunas piezas de mobiliario clínico, un gran piano Seiler y varios sillones odontológicos.
Hospital P – Lugares abandonados
Oculto por los árboles y sólo accesible a través de pequeños caminos rurales se encuentra este bello edificio abandonado. Su primer propietario fue Sir Walter Bagot, un prominente abogado de Staffordshire. El edificio se reformó en el año 1828 quedando tal y como se ve hoy en día.
Tras la muerte del último descendiente del clan familiar el edificio fue vendido. En el año 1937 se adaptó como hospital y casa de reposo con una capacidad aproximada de 100 pacientes. El hospital se cerró en 1989 y desde entonces el edificio permanece vacío y abandonado, todavía en pie por tratarse de una construcción histórica protegida. Lugares abandonados.
El interior posee una escalera impresionante de roble fino y hermosas tallas de madera. Es un edificio impresionante y muy bello.
Beelitz-Heilstätten – Lugares abandonados
Beelitz es una bella población del distrito de Potsdam-Mittelmark en Alemania, rodeada de extensos pinares. La localidad es conocida por su cultivo de espárragos blancos muy populares en la región. Aunque es más conocida a nivel mundial por el sanatorio de Beelitz-Heilstätten. Un enorme complejo hospitalario de 60 edificios abandonado desde hace muchos años.
Su construcción comenzó en el año 1898 a cargo de los arquitectos Heino Schmieden y Julio Boethke. En 1908 se amplió el complejo para duplicar el número de plazas hasta 1200 camas sobre una superficie total de cerca de 200 hectáreas. El complejo estaba dividido en dos áreas, separadas por sexos, con edificios especializados en enfermedades infecciosas. Disfrutaba de plena independencia energética.
Beelitz sirvió como sanatorio durante la Primera Guerra Mundial para los soldados heridos en el frente. Entre los 17.500 convalecientes alojados entre los años 1914 y 1918 estuvo el cabo Adolf Hitler para recuperarse de las heridas sufridas por la explosión de una granada en la Batalla del Somme.
También se utilizó como hospital de guerra en la Segunda Guerra Mundial. Durante la Batalla de Berlín alojó a miles de heridos hasta que fue ocupado en 1945 por las fuerzas soviéticas, tras la rendición de Alemania. El sanatorio era considerado como el mayor hospital militar soviético fuera de las fronteras originales de la URSS y estuvo ocupado hasta el año 1995.
Tras la retirada soviética se hicieron varios intentos de privatizar el complejo, con escaso éxito. Algunos edificios fueron renovados y se adaptaron para diversos usos. Se creó una clínica de rehabilitación neurológica, otra de rehabilitación infantil, un centro de atención e investigación para los enfermos de Parkinson y un centro cultural. El resto del complejo se abandonó a su suerte y poco a poco empezó a convertirse en un lugar fantasmal.
Su inusual arquitectura junto a la decadencia de los edificios convirtieron al sanatorio en un escenario ideal para la producción de películas. Aquí se rodaron algunas escenas de «El Pianista» de Roman Polanski en el año 2002. También fue escenario para «Valkyrie» protagonizada por Tom Cruise en el año 2008.
Enfermería Samuel R. Smith – Edificios abandonados
Samuel Russell Smith dedicó su vida a la atención de enfermos sin recursos llegando a utilizar su propia casa como enfermería. Las cuatro torres cónicas, situadas en cada esquina del edificio, estaban destinadas para las habitaciones de ciertos pacientes ya que se pensaba que su forma ayudaba a la dispersión del polvo y los gérmenes. El edificio original de ladrillo también fue conocido como la Torre Memorial Frost.
Fue construido en 1887 y abrió al público en 1890. En 1979 el hospital se trasladó y el edificio se cerró quedando abandonado desde entonces. Se consideró en varias ocasiones su certificación como Monumento Histórico. Así se iniciaron los trabajos de renovación de las estructuras principales pero la obra se paralizó. Solo se mantuvo en pié la escalera de hierro principal, el techo, suelos y la fachada del edificio. Finalmente el antiguo hospital ha sido demolido en marzo de 2012.
Maison Heinen – Edificios abandonados
La Casa Heinen es un mágico lugar abandonado desde hace muchos años. Es difícil conocer desde cuando fue exactamente abandonada pero en su interior todavía se conservan documentos fechados desde 1950. Dado que algunos medicamentos encontrados caducaban en 1994 podemos deducir que el abandono se produjo en esa fecha como tope.
Su propietario fue un granjero llamado Josef Heinen. Debía ser una persona bastante religiosa porque abundan los crucifijos y cuadros de temática religiosa. El mobiliario es impresionante y todavía muy bien conservado. La mayoría de las paredes y techos están maravillosamente decorados. La escalera es de una gran belleza (los detalles no se aprecian bien en la imagen). Durante las 4 horas que el fotógrafo permaneció allí otras ocho personas aparecieron por el lugar para explorarlo.
Mansión Shattuck – Edificios abandonados
La Mansión Shattuck está situada en una enorme finca de 55 hectáreas de Long Island, Nueva York. La familia Shattuck era propietaria de una cadena de tiendas y restaurantes de comidas caseras (restaurantes Schrafft) en Nueva York y varias ciudades cercanas. Cuando Ed Shattuck murió la finca quedó abandonada.
A principios de los 70 el Condado de Nassau compró la propiedad para especular con los terrenos (tenían planes de hacer un campo de golf o venderlos a una inmobiliaria). Gracias a la oposición de los vecinos el lugar se conservó en beneficio de toda la comunidad. Se protegió como una reserva forestal y es conocido en la actualidad como Manetto Park Hills. La Mansión todavía se encuentra en pie pero su interior está muy deteriorado y cubierto de pintadas. Lugares abandonados.
Hospital Psiquiátrico Lier – Edificios abandonados
En 1921 los condados de Buskerud y Vestfold de Noruega decidieron construir un «sindsygehus» (centro psiquiátrico) en Lier. Levantaron un gran hospital con capacidad para 552 pacientes dividido en seis bloques. También dos edificios para funciones administrativas, lavandería y una capilla. Todo el complejo se terminó en 1926 con el nombre de Asilo Psiquiátrico Lier. Su diseñador fue el arquitecto Víctor Nordan que aprovechó parte de los edificios de la finca Foss para el nuevo uso.
La elección del lugar a los pies de una colina y en medio de un espectacular paisaje respondía al interés de recrear el mejor ambiente para el descanso de los pacientes.
El lugar fue escenario de los mas crueles tratamientos psiquiátricos. Sus edificios ocultan oscuros recuerdos de un capítulo de la historia de Noruega que nadie quiere recordar. Los médicos presionados por la industria farmacéutica y el deseo de conocimiento experimentaron nuevos medicamentos con los enfermos. Se practicaron muchas lobotomías y los mas brutales electroshocks. También se experimento con drogas entre las que destacaba el LSD.
El Asilo Psiquiátrico fue trasladado en el año 1986 y desde entonces el edificio quedó vacío y totalmente abandonado. Hoy en día es un lugar oscuro y tétrico con una historia detrás plagada de sufrimientos. El edificio se encuentra muy deteriorado y cubierto de pintadas tanto en el exterior, como en el interior. Edificios abandonados.
Fotografías: Andreas S, Fritz Vrielink, Paul Howzey, Tatyana Kildisheva, Wassim Diab, Marcel Wetterhahn, Teolc Eniger, Marzena Grabczynska y Dennis Minner.
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